La Historia y sus fuentes
Investigadores/as del pasado
Un artículo de Fernando Peña Rambla
Proponemos la realización de un proyecto de investigación histórica. Tras dos sesiones en las que el docente explica qué es la Historia y las características de sus fuentes.
En el momento en el que el alumnado de primer curso de la ESO se inicia en el estudio de la Historia es conveniente hacer una reflexión sobre la naturaleza de una ciencia con características peculiares. Comprender la naturaleza de la Historia facilita al alumnado la estructuración de sus conocimientos y a la consciencia de su utilidad. Huyendo de la tradicional concepción de la Historia como un saber con una fuerte carga subjetiva que se basa en una mera acumulación de datos, por lo que se considera que una persona que sabe Historia es quien es capaz de acumular memorísticamente gran cantidad de ellos, hoy en día debemos apostar por una concepción más abierta y orientada a la comprensión, remarcando que lo que interesa es el conocimiento que obtenemos a partir de la reflexión sobre las causas y las consecuencias de los hechos históricos.
Vídeo del proyecto
Conceptos básicos
Así, en este momento es fundamental dejar claro algunos conceptos básicos:
Pincha en “+” para desplegar la explicación a las preguntas
1. ¿Qué es la Historia?
La Historia es la ciencia que estudia al ser humano en sociedad a través del tiempo.
2. ¿Quién hace la Historia?
3. ¿Cuál es la peculiaridad de la Historia?
4. ¿Cómo se hace la Historia?
En la Historia la memoria es importante, como en todas las ciencias, pero más aún lo es la comprensión y relación entre los hechos.
5. ¿Por qué y para qué estudiamos Historia?
Estudiamos Historia porque es un saber que nos puede ser útil para mejorar nuestra vida.
6. ¿Cuándo empieza y cuándo acaba la Historia?
La Historia empieza cuando existen seres humanos (hace unos 5 millones de años) y acaba en la actualidad.
Desarrollo
Para consolidar el conocimiento de la Historia como ciencia y sus peculiaridades proponemos la realización de un proyecto de investigación histórica. Tras dos sesiones en las que el docente explica qué es la Historia y las características de sus fuentes, a partir de la explicación, la proyección de imágenes y la reflexión sobre sentencias sobre la Historia y ejemplos de la vida cotidiana (el nombre de una calle, una fotografía antigua, una moneda, etc.), se plantea al alumnado la realización de un trabajo basado en la búsqueda y análisis de una fuente histórica antigua que tengan en su casa o en casa de sus abuelos, familiares o vecinos.
Para extraer información de estas fuentes se proporciona al alumnado una ficha de trabajo en la que se presenta una guía para interrogar científicamente la fuente, poder situarla en el tiempo y dotarla de sentido histórico. Una vez aclaradas todas las preguntas proponemos dejar al alumnado una semana de tiempo para que realice la investigación en casa, aunque el profesorado realizará un seguimiento general durante las clases. Una vez transcurrida la semana el alumnado ha de presentar el trabajo escrito al docente, ha de presentar y explicar oralmente el objeto al resto de la clase, a razón de unos cinco minutos por alumno/a (la actividad puede ocupar una clase o dos, dependiendo del número de alumnos). Se pueden incluir fotografías y vídeos, especialmente en aquellos casos en los que la fuente seleccionada sea delicada o de un alto valor sentimental o material y no se aconseje su exposición en clase. Normalmente el alumnado consigue un conocimiento sorprendente e inesperado que le permite acceder a dimensiones desconocidas de su historia personal o familiar.
Todas las exposiciones han de ser escuchadas con interés y respeto y al final de cada explicación se abre un turno de preguntas y debate. Con todas las fuentes explicadas y expuestas en clase se realiza una exposición, dividida según el tipo de fuente que se trate y esta exposición puede abrirse a otras clases, trabajar el lenguaje en otras materias lingüísticas, incorporar conocimientos de tecnología, etc.
Durante la semana de tiempo en la que el alumnado prepara su trabajo es el momento ideal para trabajar en clase las categorías temporales (año, década, siglo, etc.), los números romanos para los siglos, la división de la Historia en grandes etapas y la construcción de ejes cronológicos.
Con esta actividad consolidamos el conocimiento de los procedimientos propios de la Historia como ciencia y despertamos la curiosidad y valoración del alumnado por los restos del pasado y por su propia historia personal y familiar. El alumnado comienza a ser consciente de que vive rodeado de restos del pasado que tienen un significado y un valor que hace falta apreciar.
La evaluación de esta actividad se realiza a partir de una rúbrica que tiene en cuenta tanto el trabajo de los contenidos como la expresión oral y escrita, además de las competencias cívicas de respeto, tolerancia y capacidad de aprender.
Investigadores del pasado
La Historia y las fuentes históricas
Vamos a construir una explicación histórica de la fuente que has escogido. Es importante que la explicación esté basada en un proceso de investigación científica. Para comenzar, contesta a las siguientes preguntes:
1. Fecha de la fuente
Busca el año o época de la fuente. Investiga los hechos más importantes de aquella época en el mundo y en España. Puedes utilizar Internet, pero también preguntar a tus familiares.
2. Descripción de la fuente
Describe la fuente: ¿Qué es? ¿Cómo es? ¿Porqué tenías esta fuente en casa? ¿Dónde estaba guardada? ¿Qué información ofrece sobre su época? ¿Y sobre tu familia?
3. Tipo de fuente
Clasifica tu fuente: ORAL, MATERIAL, ESCRITA o ICONOGRÁFICA
4. Investiga la fuente
Con la ayuda de la tu familia investiga toda la información que puedas relacionada con la fuente: cómo llegó a tu casa, para qué servía, etc.
5. Opinión personal de la fuente
¿Qué opinión personal tienes sobre la fuente?
6. Investiga la fuente
Con la ayuda de la tu familia investiga toda la información que puedas relacionada con la fuente: cómo llegó a tu casa, para qué servía, etc.
6. Opinión personal de la actividad
Opinión personal. Explica de una forma sincera y razonada tu opinión sobre esta actividad.
7. Informe final
Como buen detective, realiza un informe final, escrito a mano y con una fotografía de la fuente, en el que se destaque toda la información importante que has obtenido de ella (mínimo de 150 palabras). No olvides cuidar mucho la presentación i la ortografía.